Tintín CFH

vicrogo wrote:Yo lo leí con unos 15 añitos, época en la que me encantaba el tema OVNI. A mí me encantó ver el platillo en un Tintín, de hecho me chocó más la levitación de Rayo Bendito en Tintín en el Tíbet, eso lo consideré una "licencia literaria", pues me parecía imposible "en la realidad"; en cambio, el platillo me resultaba un fenómeno improblable, pero real.

A mí tampoco me choca demasiado lo del Ovni. Por cierto, sobre la levitación...¿Te has fijado en la última página de Tíbet? ¡Aparece levitando de nuevo (a la derecha)! Hay un usuario del foro, Llamp Beneït, que tiene la escena como avatar.



Un saludo.

Lo curioso es que en la revista Tintin no aparece levitando, pero en el crayonné original de Hergé sí.

¡Y yo que me creía observador! Nunca lo había visto... hasta hoy gracias a vosotros.
No, si cuando digo yo que en este foro aprendo todos los días, no es una frase hecha...

Ostras, es verdad, en el Journal no sale...



Bueno, dejo el tema que es of topic. Perdón.

Pues yo tengo que reconocer que Vuelo 714 para Sidney me parece bastante bueno. Si bien es cierto que, en mi opinión, el guion decae cuando arriban a la isla, y en toda la parte en la que permanecen presos. Sin embargo, creo que vuelve a ganar una gran calidad una vez que entran en la cueva que les lleva al templo extraterrestre. Y sí, lo digo abiertamente, me gusta que introduzca el elemento extraterrestre. De hecho, me parece mucho más realista la idea de que exista vida inteligente en algún lugar del universo (aunque la idea de que alguna vez podamos llegar a estar en contacto con ellos sí me parece muy poco probable), que un chamán inca sea capaz de realizar un ritual mágico, por no hablar de la levitación o del yeti... Sí es cierto que incorporar el elemento extraterrestre parece que atenta contra la aventura clásica y seguramente sea eso lo que produzca el rechazo en gran parte de los aficionados. Yo entiendo que esta decisión de Hergé de incorporar el elemento extraterrestre pueda resultar chocante, pero aplaudo su decisión ya que me parece el desenlace más coherente a una historia que ya desde el principio apuntaba a ser bien distinta a cualquier otra.
No quiero extenderme mucho en este comentario pues tengo pensado hacer un comentario en profundidad acerca de la aventura más innovadora y, bien podemos considerar atrevida, de la serie. Lo que sí quiero dejar señalado es que el elemento extraterrestre se intuye sin necesidad de que aparezca explícitamente el ovni. Esas esculturas en el templo subterráneo de la isla, ese Ekdanitoff con su aparatejo de telepatía o ese extraño objeto que se encuentra el bueno de Tornasol, o esa especie de zumbido de abeja... todos esos detalles dejan entrever al lector que se trata de extraterrestres, no hubiese hecho falta sacar el platillo. Creo que Hergé lo tendría que haber insinuado o camuflado de alguna forma, pero sí pienso que el final más adecuado era éste. Al final, la sensación que me produjo este álbum al terminar de leerlo es que toda la aventura no había sido más que un sueño de nuestros héroes (como La estrella misteriosa, pero que en realidad nada había sucedido y al final se disponen a tomar su vuelo a Sidney. Pero ya entraré en detalles en otra ocasión, creo que este álbum no tiene desperdicio y no me extrañaría que con el tiempo termine ganando adeptos y mejore su reputación...

A mi no me molesta la aparición del ovni en Vuelo.

No puedo comprender como a algunos tintinólogos acepten la clarividencia de Mme. Yamila en 7 bolas o la especie de vudú del chamán inca en Templo y despotriquen sobre el platillo que aparece en esta aventura.

Herge no hizo mas que incorporar al álbum un tema que estaba de moda en el momento en que lo creó, como estaba de moda el tema de los mediums cuando escribió 7 bolas.

Chester wrote:Es que la evolución a la que me refiero justamente consistió en un aumento del caos, el orden excesivo sucumbió, la entropía reclamó su lugar, la línea dejó de ser tan clara porque la vida no es tan cuadriculada ni la mente de Hergé pudo serlo siempre y al final el caos tímidamente se abrió paso.

He mirado y hace mas de cinco años que escribí eso. Me alegro que te guste Wolfipgl. Ya no estoy participando tan a menudo como antes, pero qué buenos momentos he pasado en este foro, y sobre todo qué buenos amigos he hecho.

Hasta pronto

Amigo Chester, me pareció una explicación sublime que sintetizaba la teoría de la decadencia de la obra del maestro. Se puede decir más alto pero no más claro y mejor explicado en tan pocas palabras.

A mi la decadencia me atrae porque lo hace más vivo al autor y a sus personajes, más humanos. Por ejemplo, tanto en Vuelo 714 como en Pícaros vemos las arrugas de Haddock como nunca antes se habían visto: la frente arrugada, las cejas moviéndose... ya no es tan línea clara y tiende a lo grotesco. Pero esa agresividad en el trazo me parece más natural a veces que el excesivo orden y las viñetas cuadriculadas. En el fondo es volver a la libertad y expresividad de las versiones en blanco y negro. Si hubiese sguido haciendo más historias yo creo que Hergé habría jugado más con la forma de las viñetas, incluso llegando a suprimir viñetas en momentos específicos como hace alguien tan clásico como Jacobs.

Si, es posible.

También es verdad que parte de esa decadencia radica en dejar dibujar cada vez más a sus colaboradores, especialmente De Moore, cuyo dibujo es sensacional pero no acaba de hacerme tanta gracia como la sencillez original del maestro (ejemplo: hace tiempo comentamos las distintas versiones de isla -B&N, color y segunda revisión en color, donde se ve mucho la mano de Bob con un dibujo muy cuidado pero que pierde gracia en el affair de los bomberos).

Yo creo que la profusión de primeros planos que se empieza a ver en esta historieta y que en Pícaros es ya casi continua, obedece mucho a la influencia de sus colaboradores , el aumento de carga de trabajo de éstos incluso en los personajes principales, junto con un cansancio excesivo del jefe. Vamos ... lo que acabaría en la plancha bidón...