Ahí va:
Lo saqué de aquí ----> http://www.dooyoo.es/comics/tint-n/1012432/Ninfa_del_amor wrote:Hoy comienzo una nueva travesía en Dooyoo y voy a hacerlo hablando de uno de los cómic más conocidos y, posiblemente, leídos de las últimas décadas.
Quisiera comenzar diciendo que, en contra de la mayoría de las opiniones que en esta web hay sobre Tintín, a mí no me gusta en absoluto; es más, me parece un cómic bastante malo, cuyos dibujos y diálogos son muy pobres y con unos personajes completamente limitados.
Pero empecemos por el principio.
EL AUTOR.
Georges Remi (más conocido como Hergé, por ser la pronunciación de sus iniciales invertidas) es el creador de esta afamada serie; pero no es la única historieta que hizo, ya que también creo otros cómic entre los que cabría destacar Las aventuras de Jo, Zette y Jocko y Quique y Flupi.
Durante su adolescencia afloró su pasión por el dibujo y muchos de ellos serían publicados en Le Boy-Scout, siendo en esta época de su vida cuando empezó a usar el seudónimo que le acompañaría el resto de su vida. Unos años más tarde, concretamente el 10 de enero de 1929, Tintín apareció por primera vez en las páginas del Petit Vingtième.
Durante la posguerra, Hergé tuvo innumerables problemas: se canceló la publicación de las aventuras de Tintín y fue detenido en 4 ocasiones acusado de simpatizar con el Nazismo y el Rexismo.
Más tarde, con motivo del esfuerzo que le suponía la revista Tintín y por serios problemas de salud, Hergé se pasa muchos meses sin publicar ningún cómic.
Hergé muere el 3 de marzo de 1983, a los 75 años, en la Clínica Universitaria Saint Luc de Bruselas, debido a complicaciones de la anemia que sufría desde hacía varios años, dejando inacabada la vigesimocuarta aventura de Tintín, Tintín y el Arte-Alfa.
EL CÓMIC.
Supongo que todos, o la gran mayoría de los que me leéis, sabréis quién es Tintín y de qué trata este cómic. Muy resumidamente: en esta serie de cómic se pueden ver las vivencias de un joven reportero que se ve envuelto en extrañas aventuras, acompañado siempre de su inseparable Milú, un perrito fox-terrier.
La popularidad del personaje ha sido la causa de la producción de varios álbumes no oficiales, esto es, no autorizados por Hergé y sus herederos. Las ediciones piratas se han centrado sobre todo en el primer álbum de la serie, Tintín en el país de los Soviets, que durante mucho tiempo Hergé se negó a reeditar por su contenido político. También se han hecho varias adaptaciones cinematográficas de la serie, tanto en dibujos animados como en cine real.
Antes de finalizar esta pequeña introducción, decir que esta saga de cómics es capaz de denunciar en sus páginas los peligros del comunismo, hacer una apología de las ventajas del colonialismo, contener en muchas páginas tintes racistas y tener una clara misoginia; pero de estos aspectos hablaré un poco más adelante, porque antes de pasar a analizar el cómic un poco más detenidamente, creo que es imprescindible conocer a los personajes que aparecen en estos tebeos.
LOS PERSONAJES.
-Tintín y Milú.
Son los los únicos personajes que aparecen en todas las aventuras de la serie. Tintín, como ya sabemos, es un reportero que se ve envuelto en muchas aventuras y cuya edad es un misterio. Una de las características que más me llama la atención en Tintín, común al resto de personajes, es su marcada asexualidad.
Milú, por su parte, es el compañero de aventuras del reportero. Este entrañable perrito es incapaz de hablar pero siempre se hace entender a la perfección. Entre sus aficiones más destacadas están los huesos (típico, por otra parte, de los perros) y el Whisky.
-El Capitán Haddock.
Es un marino de nacionalidad no aclarada, de aspecto rudo pero que tiene un buen corazón, marcado por su gran alcoholismo (afición que comparte con Milú, sólo que éste último sabe controlarse). Es un personaje que tiene un marcado carácter, muy dado al insulto extraño y muy impulsivo.
-Hernández y Fernández.
Son una pareja de policías que, a pesar de ser idénticos, no guardan ningún parentesco. La única manera de distinguir a uno del otro es en el bigote. Estos amigos de Tintín son unos policías bastante ingenuos, yo diría paletos, que lo único que hacen es meter la pata constantemente.
-El profesor Tornasol.
Parece ser que el autor no se esmeró demasiado para caracterizar a este personaje: es el típico científico friki, despistado, un tanto desaliñado e inteligente. Este científico va creando inventos cada vez más importantes. Así, su primer invento no es muy serio (un péndulo que indica posiciones), pero poco a poco va superándose y realiza creaciones más impactantes (al final es capaz de reducir a la nada ciudades enteras).
-Bianca Castafiore.
Es el único personaje femenino de la serie y normalmente no sale muy bien parada. Es una cantante de ópera, corpulenta, de fuerte carácter y muy deshinibida, enamorada del Capitán Haddock (aunque nunca lograra decir correctamente su nombre).
-Otros personajes.
Además de los mencionados, estas aventuras cuentan con la presencia de varios personajes secundarios, como el malvado Rastapopoulos, el mercenario Allan Thompson, el general Tapioca o el comerciante Oliveira da Figueira.
LA ATROCIDAD HECHA CÓMIC.
Como ya mencioné al comienzo de mi opinión, Este cómic no es santo de mi devoción.
El primer aspecto que me llama la atención es la gran misoginia que se desprende sus páginas. ¿Cuántas mujeres salen en Tintín? En toda la colección (y tengo todos los álbumes), ¿cuántas mujeres pronuncian más de tres frases? La respuesta sería "una": Bianca Castafiore, y es una respuesta con trampa, porque viéndola (y viendo la reacción que hacia ella tiene el Capitán Haddock) uno juraría que es un travesti. Pero no basta con decir unas pocas frases para que no se considere misógina la obra, también hay que valorar qué es lo que dice… y, amigos, esta mujer además de hablar poco, habla tonterías. Me juego el pellejo a que si Bianca se llamara, por ejemplo, Piero Castafiore, sería un personaje menos llano, si es que alguien interesante cabe en la obra de Hergé.
Hay muchos más aspectos por los que no me gusta Tintín ni Hergé además de la posible misoginia y el racismo que se aprecian en sus páginas, de modo que seré lo más breve posible.
¿Por qué no me gusta Tintín? Pues bien, por varios motivos:
Los dibujos son muy malos. Hergé es un mal dibujante. Que dibuje mejor que yo no le convierte bueno. Hergé sabe menos anatomía de la justa, como demuestra el hecho de que jamás escorza (dibujar una figura en un movimiento más o menos forzado que requiere de perspectiva), mueve la figura como un maniquí, no como un pedazo de carne (como sí hace gente como Alex Raymond o Alex Toth), sus personajes son incorrectos anatómicamente, las figuras están torpemente movidas, los personajes son muy inexpresivos (lo que demuestra su torpeza a la hora de mostrar emociones), etc.
Todo ello lo convierte en un mal dibujante. Creo que no es una cuestión muy opinable: si un dibujante no sabe anatomía, mueve mal la figura, sus personajes son inexpresivos, etc… es un mal dibujante.
Hergé es un mal narrador. Lo es desde el momento en que acumula viñetas sucesivamente sin ninguna intención o afán narrativos. Lo es desde el momento en el que se suceden varias viñetas con "cámara" inamovible. Lo es desde el momento en el que no emplea recursos tales como el contrapicado, el picado, los primeros planos, etc… Lo es desde el momento en el que es incapaz de saber que un primer plano de un personaje acrecienta la sensación de sorpresa para el lector, pero él no dibuja primeros planos.
Queda el tema de los argumentos. Las historias de Hergé pueden gustar más o menos, incluso pueden resultar más o menos entretenidas, pero realmente tampoco son un prodigio de originalidad ni de una sofisticación extraordinaria. Cuando uno lee la saga de Chihuahua Peral, del Teniente Blueberry, escrita por Charlier, Watchmen, tiene la sensación de estar leyendo algo realmente grande, mientras que Tintín no pasa de ser entretenido y eficaz.
En resumen: si tenemos un cómic manifiestamente mal dibujado, manifiestamente pésimamente narrado y decentemente escrito tenemos un mal tebeo. No se trata de que me guste o no, se trata de que es malo.
Llegados a este punto, la mayoría de vosotros me podríais replicar preguntándome que por qué Tintín, un cómic tan flojo, goza de semejante éxito y reconocimiento en este país (y en otros como Bélgica).
En primer lugar habría que decir que no conozco absolutamente a nadie que lea comics habitualmente que tenga a Tintín entre sus favoritos. Nadie.
Los seguidores de Tintín se podrían dividir en dos grupos: los Tintinólogos y los lectores ocasionales. Los tintinólogos sólo leen Tintín y lo consideran lo más de lo más, algo lógico si es lo único que han leído. Por el contrario, los lectores ocasionales son gente que ha leído poca cosa más aparte de Tintín (básicamente Astérix, Lucky Luke, Mortadelo y poco más) y fundamentan su defensa de Tintín en que en su infancia les hizo pasar muy buenos ratos, lo cual nos lleva directamente a una cuestión importante: La nostalgia es el peor enemigo del buen criterio.
Cuando algo te hace disfrutar de joven, es complicado que la puedas juzgar con objetividad cuando lo vuelves a probar de adulto. A mí me gusta Karate Kid porque me encantó con 9-10 años, mientras que si la viera ahora por primera vez dudo que pasara del primer cuarto de hora de la película.
Tenemos otro ejemplo muy claro en los cómics de superhéroes. El 99% de la gente que lee superhéroes:
a) es un niño o adolescente.
b) Empezó a leerlos de niño o adolescente.
En los cómics de superhéroes hay auténticas obras maestras como Watchmen, de Alan Moore y Dave Gibbons (el quijote de los superhéroes), el Born Again, de Miller y Mazzuchelli, el Dark Knight de Frank Miller, etc… pero es francamente complicado que una persona de 30 años coja un tebeo en el que el protagonista se pone un traje de colores para pegar a los malos y se lo tome en serio, por buena que sea la historia… y creedme si os digo que las hay muy, muy buenas.
Así que el éxito de Tintín radica, creo yo, en que es entretenido, sobre todo cuando eres un niño. Su sentido del humor, ahora tan obvio y evidente, en su momento te hace gracia. Sus dibujos no son desagradables del todo, sobre todo cuando has leído pocos cómics y no tienes puntos de referencia muy superiores a mano, etc...
A ver si me explico: Tintín es, al igual que, por ejemplo, Mortadelo y Filemón, un mal tebeo desde el punto de vista formal. Narrativamente es una calamidad y está mal dibujado. No obstante, los argumentos suelen ser entretenidos, por eso gente que ha leído pocos tebeos lo suele interpretar como un buen cómic.
¿Cómo es posible que un mal comic tenga éxito? Pues porque es un tebeo muy fácil de asimilar. Hasta un niño pequeño puede hacerlo. Cuando lees Tintín de pequeño y luego te lo relees de mayor se te desmonta casi por completo y lo toleras únicamente por nostalgia. Por el contrario, cuando lees Astérix de pequeño y lo relees de adulto descubres que es un cómic genial, con múltiples lecturas, magistralmente dibujado y más que correcto narrativamente hablando.
No obstante, todo lo dicho sobre porqué pienso que Tintín es malo se puede desmontar con 2 simples palabras: gusto personal. Como se suele decir, para gustos los colores… aunque esto también sería interesante debatirlo. Habriamos llegado al espinoso asunto del "gusto personal", ese dogma de fe de la era contemporánea que reduce cualquier discusión sobre arte al 'gusto personal' (que puede ser de todo menos personal; más bien producto de una sociedad de consumo) y que remite al espectador de la obra a sus propias opiniones, también 'personales' y, a decir de muchos, absolutamente respetables.
Lo he explicado lo mejor que he podido. Aún habría mucho que decir (aunque no sé si sería este el lugar apropiado) sobre la manera en que se manipulan los gustos de las masas; también podría hablarse de lo injusto que resulta la equiparación del placer y la bondad, como si el mero hecho de que me guste algo implique necesariamente su bondad -ética- o su calidad -estética-.
Sin embargo, creo que la única forma de convencer a la peña (si es que está dispuesta a dejarse convencer, que ésa es otra) consiste en explicar detenidamente, caso por caso, por qué algo es bueno aunque no me guste o por qué algo es malo aunque me guste. En este caso no he podido hacerlo porque, para mí, Tintín es malo y no me gusta.
Esta es mi modesta opinión. Espero que haya sido de vuestro agrado.
Siempre vuestra, Ninfa_del_amor.