Tintín CFH

Ahora que tengo reciente el Congo porque acabo de escribir mi 'nota de lectura' sobre él, me viene a la memoria un detalle curioso. Cuando esta aventura salía por primera vez, semana tras semana, en las páginas del Petit Vingtième, en París, con gran éxito, miles y miles de visitantes hacían cola para disfrutar de la gran 'Exposición Colonial', una especie de gran feria de muestras, en la línea de las Exposiciones Universales o World Fairs que tanto furor hicieron en el XIX (la torre Eiffel es un ilustre resto de ellas). Al mismo tiempo, para protestar contra los valores sociales dominantes, el grupo surrealista abrió su propia 'Exposición anti-colonial', pero esta última no tuvo éxito.
Traigo esto a colación para demostrar que los valores, los tópicos y los estereotipos representados por Hergé en su Congo eran los mayoritarios y ampliamente aceptados por las sociedades europeas de su tiempo. El colonialismo concitaba un amplio consenso entonces. Y el anti-colonialismo era aún algo extravagante, minoritario y desconocido por la inmensa mayoría de europeos; algo - propiamente hablando - 'surrealista'.

Efectivamente, lo que movía a surrealistas, dadaistas y otros patafísicos en sus performances era la provocación.
¿Y qué mayor provocación que criticar el colonialismo?

Paulus wrote:Ahora que tengo reciente el Congo porque acabo de escribir mi 'nota de lectura' sobre él, me viene a la memoria un detalle curioso. Cuando esta aventura salía por primera vez, semana tras semana, en las páginas del Petit Vingtième, en París, con gran éxito, miles y miles de visitantes hacían cola para disfrutar de la gran 'Exposición Colonial', una especie de gran feria de muestras, en la línea de las Exposiciones Universales o World Fairs que tanto furor hicieron en el XIX (la torre Eiffel es un ilustre resto de ellas). Al mismo tiempo, para protestar contra los valores sociales dominantes, el grupo surrealista abrió su propia 'Exposición anti-colonial', pero esta última no tuvo éxito.
Traigo esto a colación para demostrar que los valores, los tópicos y los estereotipos representados por Hergé en su Congo eran los mayoritarios y ampliamente aceptados por las sociedades europeas de su tiempo. El colonialismo concitaba un amplio consenso entonces. Y el anti-colonialismo era aún algo extravagante, minoritario y desconocido por la inmensa mayoría de europeos; algo - propiamente hablando - 'surrealista'.

Y el que no lo quiera ver es porque no quiere... Por eso hay que incardinar cada cosa en su sitio.