Scardanelli wrote:
Celebro que, al fin, le des a Martin la credibilidad que se merece. Con sus virtudes y sus defectos, es un hombre que trabajó más de 20 años en los Studios y su información es de primera mano. Digo esto porque Martin era un hombre que conspiraba, un hombre que mentía, un hombre resentido que profería insídias… Afortunadamente, media docena de posts después, se ha transformado en un testimonio de gran valor a la hora de enjuiciar el peso de un colaborador en la elaboración de los álbumes. Efectivamente, yo también doy algo de credibilidad a las cosas que dice._
Hombre, estás hablando con alguien que tiene todos los Alix de Martin en francés y en castellano (Casterman, Norma y Netcom), aparte de la serie Lefranc (Casterman, Grijalbo y Netcom) a lo que hay que sumar los facsimiles de Lefranc y Alix que me llegaron hace poco. Por lo que le tengo un respeto muy grande... lo de ¡Insidias! obviamente era irónico recordando cierta polémica que hubo hace un tiempo...
Lo que sí me gusta es leer declaraciones suyas en francés original, contrastadas y no traducidas. Así sí que les doy el valor que merecen, sobretodo si son de 1985 con Bob De Moor en vida y con derecho a réplica.
Scardanelli wrote:
Insisto, porque no estoy seguro de explicarme bien. No crítico a De Moor. Me parece muy bueno. Pero creo que cuando estaban todos la calidad gráfica era mayor. Y que cuando De Moor empezó a adquirir demasiado protagonismo, pues primero cambió el estilo (Vuelo) y luego directamente bajó el nivel (Pícaros). Porque por muy bueno que fuera, no era Hergé. Y así, cierro el círculo diciendo que mi critica no iba dirigida al colaborador, sino al que estaba más arriba.
Según he podido estudiar, De Moor era la mano derecha de Hergé durante ésos 8 álbumes, mientras que el resto hacían funciones más secundarias dentro del acabado final del cómic. Las posturas de los personajes las hacían entre los dos, con Hergé posando y De Moor dibujando. Después Hergé tomaba como referencia ésas posturas para dibujar a los personajes en el crayonné. De Moor se encargaba también de la mayoría de la visitas a exteriores para dibujar barcos o paisajes. Ésos dos elementos (Personajes y decorados)
personalmente me parecen la esencia de la viñeta por encima del resto.
Por lo tanto su relación fue más estrecha que con los demás. Pienso que Martin-Leloup eran sustituibles, pero De Moor no.
Scardanelli wrote:
P.D. Sobre lo que habría sido De Moor y su “sacrificio”… bastante compleja es la realidad como para perderse en mundos paralelos. A los autores se les juzga por lo que hacen, no por lo que podrían haber hecho. Y De Moor hizo mucho, es una leyenda de la BD. Aunque creo que no dejó una obra como la que dejaron Jacobs, Martin e incluso Leloup.
Precisamente ahí veo la prueba de que dedicó más tiempo a Tintin y su trabajo con Hergé que el resto de sus compañeros. Si Martin hubiese hecho más en los Studios no habría tenido tiempo de dedicar tanto esfuerzo a Alix o a Lefranc. Y por éso su obra es más importante y más emblemática que la de De Moor, según mi opinión.
Tanto Jacobs como Leloup pudieron dedicarse a cuerpo y alma a sus respectivas series (Mortimer y Yoko Tsuno) una vez hubieron abandonado los Studios.
Tras morir Hergé, Bob De Moor realizó en sus últimos años el que para mí es el mejor álbum de Cori "La Expedición Maldita" y siguió trabajando acabando la segunda parte de "Las 3 fórmulas de Sato" y "Dalí Capitán" el último Cori que tuvo que acabar su hijo.
Scardanelli wrote:
P.D.2. Yo también creo que De Moor dibuja a Tintín tan bien como Hergé…en Isla 65 (con todos los superstars de colaboradores). ¿Qué diablos sucedió 10 años después?
P.D.3. ¿Adaptarse a la morfología de los personajes? ¿De qué hablan, de los secundarios? ¿De figurantes? ¿No hacía solo los decorados? Porque los ultras juran y perjuran que Hergé siempre, siempre, siempre, dibujó y entintó a sus personajes principales. ¿O tú también te apuntas a las insídias del Martin este? ¡ADMINISTRADOR, PARA ESTO YA! ¡INJURIAS!
De Moor también se dedicaba a los dibujos publicitarios, la supervisión de los dos largometrajes de dibujos animados (Templo del sol y Lago de los tiburones) y demás trabajos secundarios que surgían y que exigían un dominio de la morfología de los personajes. De "Isla Negra" seguramente hizo todos los crayonnés, que son de 1965, la fecha que cita Martin.
Lo que me lleva a pensar que la mejor cualidad de la plancha bidon, el mimetismo con las figuras de Hergé, las hizo De Moor y Jacques Martin dibujó el resto (Magníficamente también, pero menos difícil). Y lo digo porque comparando las obras de ambos autores el que mejor reproduce el estilo de Hergé es Bob De Moor.
Si yo fuese el editor de Casterman y tuviese que elegir entre ambos para hacer el "Arte Alfa" elegiría a Bob, basándome solo en su obra. De Martin, al que también aprecio, no he leido ningún comic que tenga el estilo de Hergé, ya que tuvo el gran mérito de crearse un estilo propio (Gran debilidad de De Moor).
Y sobre lo de la Luna, bueno, cada uno tiene sus gustos, lo que pasa es que he estado documentándome recientemente en libros anglosajones y revistas sobre la película Tintin para el artículo y siempre citaban al ciclo lunar como una de las grandes epopeyas de la serie muy susceptible de ser llevado a la pantalla por su calidad.
Independientemente de lo que opine cada uno, los dos álbumes de la Luna marcan un momento decisivo en la serie, técnicamente por la incorporación de su colaborador más estrecho y narrativamente por lo que supone de un nuevo tipo de aventura para Tintin. Aparte de los momentos emocionales como la salida del cohete o toda la parte final con la angustia del aterrizaje y la "muerte" de Wolff.
Sin ir más lejos, en el "Tintin Pocket Essential" califican ambos álbumes de 5/5 señalando que:
"The Moon Story is Hergé at his best. The book is a triumphant achievement on virtually every level. Story-wise, the characters are pitched perfectly and, as mentioned above, Wolff rises to true literary level (...) Graphically the book has withstood the test of time better than most other proto-space exploration novels. Hergé's clean and detailed line is at the peak of its form, and particularly suits the mood of this book. (...) "Explorers Of The Moon" is a true epic of the human imagination."
Para terminar estoy de acuerdo contigo en que en "Pícaros" la labor de De Moor fue mayor que antes, sobretodo en personajes secundarios (El Carnaval, el juicio, los mismos Pícaros). Pero no por culpa de la falta de Martin-Leloup, sino porque Hergé delegó más que en otras ocasiones (Edad, cansancio, aburrimiento), aunque siguió haciendo los crayonnés con los personajes principales (Tal y como vimos en el Museo) y que constituyen el corazón del cómic.
Los defectos tanto de personajes o de guión se los atribuyo al mismo Hergé, como le ocurre a la mayoría de artistas al final de sus carreras.